Resolución municipal viciada de nulidad
porque, al emitir su voto, la presidenta de los deliberantes transgredió el
Reglamento Interno. Desembolsos garantizados, no la ejecución de la obra.
El órgano deliberante, con el voto
favorable de sus cinco miembros, aprobó hoy a toda prisa una resolución
municipal que avala un proyecto nacional de más de 900 mil bolivianos con el
que, en teoría, se busca beneficiar a la comunidad de Pueblo Nuevo.
Los concejales aprobaron la disposición
legal sin conocer el proyecto ya que el Sr. Alcalde no lo adjuntó en su
petición y, como siempre, se tuvo que atender una “urgencia” del ejecutivo
municipal, con más razón ahora que está cerca el aniversario de Pueblo Nuevo.
La prioridad del oficialismo parece ser
aprobar los proyectos (sea de donde sea que lleguen) sin importar si después estos se ejecutan o no, sin un mínimo de vocación fiscalizadora, o sea, nadie se preocupa si
las obras quedan paralizadas, abandonadas o mal hechas. Parece haber una
obsesión por desembolsar recursos económicos a diestra y siniestra. No importa
si en la “urgencia” se pisotean los procedimientos legales, porque de qué otra forma se puede entender que la presidenta del Concejo hubiera emitido su voto siendo que el
Reglamento Interno en sus artículos 106 y 113 lo prohíbe. Total, a quién le importa
que una vez más se transgreda la ley en el ilustre Concejo.
La dura realidad es que, a pesar de la
sangría de más de 300 mil dólares, el programa “MiAgua I” está fracasando en el
municipio de Minero precisamente porque a nadie le interesó si las obras se
ejecutaban o no. Los concejales creen que cumplen con su responsabilidad cuando
aprueban los millonarios convenios.
He aquí lo que cada uno de ellos
expresó a la hora de la votación:
“Ese proyecto lo gestionamos hace dos
años yo y el diputado Tupa, por lo tanto lo apruebo”, dijo el concejal opositor
Límber Guamán. El ex adenista Darwin Flambury también votó a favor diciendo:
“Que no nos pase lo que nos pasó con el proyecto ‘MiAgua’, porque este Concejo
desconocía en su totalidad sus alcances, no teníamos DBC, no teníamos nada.
[Ahora tampoco el alcalde] nos ha hecho llegar el proyecto. [Pero] no hay
problema, yo también apruebo esta resolución”. El masista Valerio Rodríguez dio
el visto bueno con el argumento de que “yo no estoy aquí para frenar al
pueblo”. Le tocó el turno al emenerrista Ruddy Rodríguez: “No podemos perder
800 mil bolivianos, por eso lo apruebo”. Por último la Prof. Fátima Egüez, presidenta
del hemiciclo, de igual manera votó a favor de la resolución diciendo: “Esa comunidad tiene bastantes años, por eso yo también la apruebo”.
El proyecto en cuestión se denomina
“Mejoramiento del sistema de agua potable en Pueblo Nuevo” y en la licitación
pública indica un precio referencial de Bs 774.122 y un plazo de ejecución de
160 días. Forma parte del Programa de Agua Potable y Saneamiento para Pequeñas
Localidades y Comunidades Rurales de Bolivia que el Reino de España financia a
través del BID. Es un financiamiento no reembolsable e incluye una contraparte
municipal del 20 por ciento (154.824 bolivianos) para “obras adicionales” que
no se especifican.
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